Son las 5:30 de la mañana y ya estamos en pie, dos horas antes del amanecer, es la hora de la verdad. Ya tenia listo y preparado todo el equipo desde la noche anterior: Hide, redes de camuflaje, cámara, tele, multiplicador, trípode, tarjetas formateadas, agua y lo más importante: el repelente para mosquitos. Nos queda por delante un café mañanero (hoy paga Juanjo) y 15 minutos de viaje, por suerte, los abejarucos están cerca. Han sido más de dos semanas de búsqueda y […]